h1

Espacios de Aprendizaje Ubicuo

septiembre 2, 2012

El avance tecnológico existente en nuestra sociedad ha posibilitado que nuestros alumnos tengan un mayor acceso a las Nuevas Tecnologías, lo que ha fomentado el desarrollo de plataformas educativas a distancia y de programas que impulsan la introducción de las Nuevas Tecnologías en nuestras aulas, surgiendo, de este modo, el concepto de aprendizaje ubicuo.

Fraser (2005), Ramón (2007) y Wheeler (2006) definen el aprendizaje ubicuo usando la fórmula: aprendizaje ubicuo = aprendizaje en línea + aprendizaje móvil.

Se trata, pues, de un aprendizaje no sujeto a limitaciones espaciales o temporales en las que se pone a disposición del alumnado las herramientas y medios necesarios para fomentar un aprendizaje permanente, en el que es posible que cada alumno o alumna siga su propio ritmo de aprendizaje.

Esta nueva concepción del aprendizaje, distribuido, como se comenta en el vídeo, en el tiempo y en el espacio, posibilita el desarrollo de un aprendizaje permanente, que puede construirse de manera colaborativa dentro de un ecosistema de aprendizaje.

No obstante, la incorporación de medios tecnológicos en el proceso de enseñanza-aprendizaje no implica, por sí sola, la calidad del sistema. Miguel Zapata–Ros, en un artículo publicado en la Revista de Educación a Distancia, Calidad en entornos virtuales de aprendizaje, desarrolla un sistema de evaluación para determinar “la calidad y la solidez pedagógica del aprendizaje móvil o ubicuo”. (Zapata-Ros, M, 2012).

En este artículo también se expone una definición muy interesante de qué pueden considerarse dispositivos móviles, aplicados en el ámbito educativo: “son dispositivos que se pueden utilizar en la actividad educativa, para aprender, y se pueden llevar en el bolso o en una cartera, y que admiten conexión 3G o wifi, o las que en su momento las sustituyan”. (Zapata-Ros, M, 2012). En la elección de estos dispositivos móviles debe también considerarse la denominada “ley de las tecnologías” de la educación a distancia (Keagan, 2005):

«No es con las tecnologías inherentes a las cualidades pedagógicas con las que se  tienen éxito en la educación a distancia, sino con  las tecnologías que están asumidas y son de uso generalizado por los ciudadanos”.

La Unión Europea desarrolla un proyecto que supone el paradigma de dicha ley. Se trata de la iniciativa eTwinning que apoya la realización de proyectos educativos a través de la red, entre  centros escolares de primaria y secundaria de todos los países europeos, mediante la utilización de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación. Los resultados han sido espectaculares, pues a finales de 2009 habían participado 78 centros escolares de 32 países y un total de 1.432 alumnos con el desarrollo de cuatro mil proyectos.

El plan por tanto “se ha convertido en un laboratorio real de aprendizaje para una mayor aplicación de las TIC en los centros escolares europeos” según el estudio  desarrollado por el investigador de la UE, Conor Galvin, acerca de los resultados obtenidos con este plan en sus primeros años de andadura.

“En la mayoría de estos proyectos se demuestra que los alumnos dominaban a la perfección el uso de las TIC; y eso comprende: el video digital, la realización de CDs y DVDs y su participación y/o creación de espacios en la web, como páginas y blogs. Muchos de estos tuvieron resultados auténticamente profesionales en su apariencia y demostraron su efectividad como vehículos para los proyectos” (Conor Galvin, 2009).

Experiencias como las de eTwinning demuestran que el conocimiento del uso de las TIC por parte de los alumnos no sólo les motiva a la investigación y a su formación, sino que proporciona al alumno creatividad en su aprendizaje, además de fomentar la interculturalidad, la adquisición de más competencias lingüísticas, el mayor dominio y adquisición de destrezas en el uso de las nuevas tecnologías y que adviertan la importancia del intercambio y del trabajo colaborativo entre alumnos de diferentes países, tal y como evidencian en el siguiente video las palabras de los docentes, protagonistas indispensables del proyecto.

El vídeo refleja que en el presente 2012 diez trabajos presentados por otros tantos colegios españoles obtuvieron los premios nacionales eTwinning. Uno de ellos, el elaborado por el IES Marina Cebrián bajo el título “Family lab”, además de abordar la educación en valores, fue premiado por la metodología colaborativa que emplearon, mediante grupos de nacionalidad mixta, aportando al trabajo una dimensión europea consecuente con la universalidad del tema, tal y como se explica en la web del plan. Se trata de una característica común a los restantes proyectos galardonados, quienes han creado sus propios espacios de aprendizaje ubicuo,  mediante una red compartida con centros ubicados tanto en  otros puntos de la geografía española como europea.

En cifras actuales (de 2012) participan en esta propuesta más de 7.400 centros educativos españoles, con 5.200 proyectos y 13.500 docentes implicados, lo que posiciona a nuestro país en el quinto lugar de Europa.

Otro ejemplo claro de escenarios de aprendizaje ubicuo fue el proyecto OLCP, implantado en países con bajo nivel de desarrollo, el cual planteaba como base que cada alumno tuviera su propio portátil, en lugar de un ordenador para varios alumnos en un aula. Era un proyecto de educación a través de las tecnologías de forma que su aprendizaje lo realizan tanto dentro como fuera del aula y en cualquier momento (Adolfo Plasencia, 2012).

Sin embargo, aún queda mucho por avanzar en cuanto a la generalización del concepto de espacios de aprendizaje ubico como una herramienta más y complementaria a la enseñanza tradicional en los centros escolares españoles. Los principales condicionantes suelen ser la formación y compromiso personal de los docentes o la cultura digital del propio colegio, entre otras. “Cuando la innovación en la enseñanza se introduce en los centros escolares, representando un profundo cambio en la situación y las prácticas existentes, entran en juego condicionantes, que influyen principalmente en los efectos del nuevo desarrollo, como: el compromiso personal /profesional con el proyecto; la cultura del centro escolar; la experiencia previa en otros proyectos; la formación y el apoyo o el tiempo dedicado por el profesor”, (Conor Galvin, 2009).

Esto podría propiciar la aparición de una brecha digital importante, que suma a los niños en cuyos colegios no existen escenarios de innovación educativa, o que el uso de dispositivos digitales en la educación sean escasos o estén infrautilizados, en una invisibilidad tecnológica y virtual en un futuro, frente a aquellos donde sí existen.

Se trata de lo que definía hace diez años el profesor Manuel Castells como la divisoria digital: “esa capacidad de aprender a aprender, esa capacidad de saber qué hacer con lo que se aprende, esa capacidad es socialmente desigual y está ligada al origen social, al origen familiar, al nivel cultural, al nivel de educación”.

2 comentarios

  1. Enhorabuena MJosé e Inma por vuestro post. Muy útil conocer esos casos concretos de aprendizaje ubicuo… y muy esperanzador.
    Me parece importantísimo que se sigan fomentando tales iniciativas, no sólo por su demostrada potencialidad en los procesos educativos, sino también (como hablamos en el chat del otro día) para introducir el análisis crítico y la reflexión sobre las nuevas tecnologías. Creo que es vital que desde pequeños, el alumnado (al que desde hace unos años ya podemos llamar «nativos digitales») sepan cómo manejar estas herramientas, sino que sepan también cómo funcionan, para qué sirven y para qué no. Que sean críticos, que no olviden que son herramientas para manejarse en el ámbito de lo real, que lo digital y lo físico no son realidades separadas, sino que pueden conjugarse.
    Y estas iniciativas deberían introducir en las escuelas la Educación mediática, contemplando tanto cómo se construye el mensaje en los medios de comunicación y cómo se presenta ese mensaje, que se aprenda a desmitificar el supuesto «mundo mágico» que ven a través de la televisión, que conozcan que detrás de estas tecnologías hay artificios y que nada es arbitrareo, me parece fundamental para educar a una ciudadanía crítica e independiente.
    Gracias de nuevo, y seguimos…


  2. Qué post tan completo chicas 🙂

    Que la movilidad y la flexibilidad comiencen a entrar en las aulas es muy positivo porque asemeja el sistema escolar con cómo es verdaderamente el aprendizaje: dinámico, vivo, en constante movimiento. El otro día comentábamos que en muchos casos esto no ocurre porque se siguen perpetuando modelos de aprendizaje que no se adaptan a los nuevos tiempos. El hecho de que proyectos como los que mostráis estén surgiendo quiere decir que la inquietud de los docentes va más allá y busca en todo momento que el alumnado entienda que el aprendizaje sucede en cualquier momento y lugar.

    Os dejo la referencia de un proyecto muy interesante de Universidad P2P: https://p2pu.org/es/ Aprendizaje autopersonalizado y con otros peers.



Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: