
Una ‘Tablet’ en la mochila
mayo 20, 2013«¿Será posible en un futuro no muy lejano que los alumnos acudan a la escuela o instituto sin libros y cargados únicamente con una tableta y un cuaderno? La semana pasado diversos medios digitales, como El País, La Vanguardia y La Razón destacaban una serie de proyectos piloto como el proyecto iDea y el proyecto eduTableTs que se están llevando a cabo en algunos colegios para introducir las tabletas como soporte educativo en las clases.»
Forma tradicional de estudiar mediante libro de texto: Foto: Cristina Diaz Busch
La educación no puede dar la espalda a la realidad tecnológica en la que los alumnos están inmersos. Casi todo el alumnado dispone de ordenador, tableta e Internet en casa y utilizan estas tecnologías en su día a día. La cuestión es cual es la mejor forma de integrar dichos medios digitales en la escuela o en el instituto.
Además de la alfabetización digital, la integración de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC’s) en el sistema educativo, busca la motivación del alumnado. Con los medios digitales es posible aprender jugando, lo que hace que el aprendizaje resulte más significativo, ya que los alumnos prestan más atención. Fomentan la curiosidad y la investigación haciendo que sea posible un aprendizaje informal por parte del alumnado, ya que muchas veces los alumnos buscan información complementaria al tema tratado durante la clase.
Otra manera de estudiar el mismo contenido. Foto: Cristina Diaz Busch
Además permite que el alumno aprenda de forma más autónoma, lo que permite atender a la diversidad, dado que se pueden utilizar recursos complementarios para atender mejor a los alumnos con necesidades especiales.
Pero también existen una serie de puntos controvertidos en lo que respecta a la puesta en marcha de este tipo de aulas digitales, el primero de ellos es la viabilidad económica de este tipo de aulas. En este sentido se pretende que el gasto de las familias no sea superior con este tipo de medio digital que el que ha sido hasta ahora con la compra de los libros de texto en formato papel. Son las familias las que deben comprar la tableta, lo cual les va a suponer un gran desembolso de dinero, por lo que se entiende que los libros en formato digital serán más baratos que los libros en formato papel, para que en un par de años se pueda amortizar el gasto generado por la compra de la tableta.
Otra cuestión a tratar es si se va a obligar a los alumnos a comprar un dispositivo concreto o si cada uno puede elegir la tableta que quiera, siempre que tenga unas determinadas características de sistema operativo y unas características hardware determinadas. Dado que el coste de la tableta corre a cuenta de las familias esto puede ser una fuente de diferencias, ya que algunos padres podrán comprarles a sus hijos todos los años una nueva tableta con los últimos avances tecnológicos y otros padres no. Relacionado con el anterior está también el siguiente punto, que pasa si un alumno pierde la tableta o se le cae y se rompe. Estos dispositivos son bastante frágiles y con un simple golpe puede romperse la pantalla y quedar inoperativo. En este caso los padres deberán hacer frente a un gasto extra para la reparación o la compra de una nueva tableta , lo cual en algunos casos puede ser un problema.
Otro punto que preocupa especialmente es si es conveniente que los alumnos, que ya fuera de sus horas escolares están casi todo el día pegados a las distintas pantallas, ordenador, consolas, televisión, etc. estén también la mayor parte de sus horas escolares mirando para una pantalla. En todo caso sería menos perjudicial para su vista si en lugar de tabletas se utilizasen lectores de tinta líquida, pero claro no es lo mismo, los contenidos no son tan espectaculares.
En cuanto al sector editorial no se espera un gran cambio. Las editoriales serían las responsables de preparar el contenido disponible en las plataformas educativas, por lo que aunque venderían menos libros de texto en formato papel siempre tendrían una nueva fuente de negocio a través del contenido digital.
Cristina, gracias por tu post. Es cierto que el futuro debería ser tal cual lo pintas, yendo al colegio o instituto con nuestras tablets, pero es igualmente cierto que todos los problemas o inconvenientes que mencionas, podrían surgir. ¿Donde está la solución? Quizá algunos por no decir bastantes de estos problemas se solventarían si desde los centros se nos dotara de estos artilugios tecnológicos para que todo el mundo tuviese acceso a ellos. Quizá igualmente este no sea el momento más propicio para ello pero soy de las que piensa que quien no arriesga no gana osea que ….manos a la obra que queda mucho por hacer.
Saludos
Isabel M.
Muchas gracias por tu comentario Isabel, en principio yo también me decantaría por la solución que propones de que fuese el centro el que tuviese los dispositivos, pero después le veo algunas pegas. Por ejemplo, si sólo se tienen tablets en una clase y esta es compartida luego por gran cantidad de alumnos, como es en el caso de las salas de ordenadores, los alumnos no se podrían llevar las tablets a casa con lo que se perdería gran parte del potencial de estas herramientas.
Cristina se trataría a mi modo de ver de que cada alumno tuviera su tablet. Sería en cierto modo un préstamo de tablet a cada alumno y este último tendría que hacerse cargo del mismo, su cuidado o mantenimiento y solo optaría a el mientras estuviera matriculado en el centro, después pasaría a otro alumno. En cierto modo es esto lo que se hace en mi comunidad lo que sucede es que muchos alumnos optan por no llevarse el minipc a casa.
Saludos.
Cristina muchas gracias por tu post y por las reflexiones finales. La verdad es que antes de estudiar este máster quizás hubiera sido la primera que hubiera apostado por el uso de las bibliotecas, como un «refugio» para el conocimiento, en «peligro de extinción» ante el cambio social al que estamos asistiendo y lo que ya sabemos, pues «Vivimos tiempos exponenciales». Sin embargo, ahora que he podido contrastar ideas y ver las posibilidades que ofrecen las TIC´s y con ellos los nuevos dispositivos, considero que sería un error, anclarse en el «pasado», me refiero al bolígrafo y el papel, que siempre estarán ahí.
Quizás sea hora de olvidarse un poco de las antiguas concepciones de enseñanza, e invertir por un conocimiento más enriquecedor, con más posibilidades, como hemos visto, en otras entradas de nuestros compañeros, con el Proyecto «Un portátil por un niño», conocido como OLPC. Creo que aunque sea una cuestión , en principio, algo difícil, la idea de estudiar a través de una tablet, es un gran comienzo. Sobre todo, para encauzar a los niños en aprendizajes más interactivos y emocionales. Que aprendan que las nuevas tecnologías no son sólo sinónimo de «doversión», sino además de «conocimiento» y «aprendizaje». Os dejo un ejemplo curioso, en donde un profesor pide a sus alumnos que lleven consolas a las clases http://www.ticbeat.com/tecnologias/profesor-pide-alumnos-lleven-consola-clase/
Gracias por tu comentario, Cristina, me parece muy interesante el enlace que has puesto sobre las consolas en clase, realmente se puede ver como con una aplicación adecuada cualquier dispositivo es válido para aprender.
Hola, Cristina. Muy buen tema para reflexionar. Yo pienso que si, que lo lógico es que los niños terminen usando libros electrónicos y no vayan a clase con toneladas de libros en las mochilas. Sin embargo, habrá que salvar, como apuntas en tu artículo, una serie de obstáculos. Conozco casos de algunas familias que reciben ayudas para los libros de sus hijos, y nunca compran esos libros, me imagino lo que pasaría con unas tablets. Habría robos, extravíos y roturas a las mismas puertas de los colegios. Y es que los colegios reales no son como los que sacan por la tele o aparecen en las fotos de los proyectos, desgraciadamente. Pero, en cualquier caso, pienso que el libro digital tiene muchas ventajas, a la larga, es más económico que el físico de toda la vida y es más ecológico. También empieza a haber tinta digital de colores y pantallas que no cansan a la vista, lo que ya no sería un problema.
Muchos de los que tengan experiencia docente y haya usado la sala de informática habrán comprobado que los ordenadores están en un estado deplorable. Muchos arguyeron que la implantación de equipos informáticos propiciaría la motivación del alumnado. Nada más lejos de la realidad. Los PC acabaron machacados, los teclados reventados con las teclas cambiadas de sitio, etc. En un intercambio con alumnos de Dinamarca nos percatamos de una solución simple y práctica: acda alumno llevaba su propio teclado en la mochila.
Me he acordado de esto cuando en tu entrada dices que se promoverá que el alumno aprenda de forma más autónoma, y creo que de verdad sería así. De hecho los problemas, como los que he señalado anteriormente vendrían de la educación cívica de los alumnos. Hasta hace poco se promovió lo que se llamo “Un ordenador por alumno” (http://www.abc.es/20121024/local-castilla-leon/abci-castilla-leon-tiene-ordenador-201210241329.html) que en mi región, Castilla y León, aún sigue trayendo cola, básicamente por problemas de financiación lo que ha provocado otro problema mucho más grave: esos portátiles estarán totalmente desactualizados, principalmente y como indicas en tu entrada por las tabletas.
En cuanto al desembolso económico dependerá en gran medida de las editoriales. Me explico: una tableta puede costar la mitad o incluso menos que todo el material académico para un solo curso, el problema vendrá con los contenidos. O mejor dicho, de lo cómodo (por no decir vago) que sea el profesor. La red está llena de recursos gratuitos y si el profesor o maestro hace bien su papel, que no es otra cosa que ser una guía como dice la próximamente caduca LOE, no hay necesidad de tal desembolso. Por cierto, este problema es el mismo que con los PC de la sala de informática, no es que los ordenadores no motivaran a los alumnos, es que al hacer cosas que ya saben hacer se aburren. Lógicamente.
Buenas compañeros.
Ineteresante reflexión la que haces Cristina.
Pienso que el problema tecnológico que comentas provoca cierto distanciamiento cultural, en cuanto a competencias digitales se refiere, entre la sociedad y los centros educativos. Es usual observar como los alumnos, por norma general disponen en casa de una tecnología más avanzada de la que encuentran en sus centros de estudio, de hecho esta se encuentra obsoleta o deteriorada en la mayoría de los casos, como bien comenta Javier.
En lo que respecta al gasto de las familias en tecnología, supongo que con el paso de los años, se reducirá notablemente, ya que como sabemos, los productos suelen tener una alto precio cuando salen al mercado. Hace 10 años era impensable comprar un ordenador, hoy día es absequible «casi» para cualquier familia.
No dudo que en pocos años, cada niño disponga de un ordenador personal (como bien propone el proyecto OLCP) u otro tipo de dispositivo, si no ocurre ya. No solo por el hecho de comodidad, economía y sostenibilidad, sino porque ofrecen la posibilidad de estar conectados de forma ubicua, en cualquier parte y en cualquier lugar y ello permite el aprendizaje en linea y no formal.
De hecho, hoy día, en la Universidad, ya ves como la mayoría de los alumnos lleván su portátiles para tomar apuntes. Está claro que los libros y los cuadernos serán sustituidos por las computadoras, por el hecho de que ofrecen multitud de posibilidades, formatos e información. Aunque si es cierto que necesitarían una mejor adaptación de la interface para adpatarse a las necesidades del estudiante.
En lo que si veo dificultad mayor es en la implantación de estos medios por parte de los centros e instituciones educativas, ya que parece que las subvenciones económicas tienden a ser cada vez más escasas. Por lo que puede ser posible, que en el futuro sea el alumno el que lleve su propio dispositivo personal a clase…
Hola y muchas gracias por difundir el proyecto iDEA! Por nuestra parte exponemos algunos argumentos:
El coste de la mochila digital está compuesto por el precio de cada libro de texto digital (precio que establecen las editoriales). Dependiendo de la editorial y de la materia el libro tendrá un precio inferior que oscila entre el 15% y el 50% de lo que se paga por el libro en papel. Hay que añadir el coste de la tableta, financiada a tres años. En la actualidad ya hay tabletas a 100 € que son útiles. En síntesis el ahorro para las familias será significativo y más cuando actúe plenamente la competencia. iDEA no plantea la pervivencia de las editoriales por causas económicas, lo hacemos porque hemos definido como estratégico que las editoriales sigan dando garantía de calidad a los contenidos educativos. Estamos a vuestra disposición y, por supuesto, encantados de conversar estos y otros temas. Hemos trabajado durante mucho tiempo en todos los aspectos que inciden en este ambicioso proyecto. Gracias de nuevo. http://www.universoidea.com/
Buenas tardes Cristina Díaz. Ante todo, quiero felicitarte por el excelente post y de un tema apasionante, interesante y creo que necesario, que son las tablets.
Estoy totalmente de acuerdo con la postura de que el futuro va por las tablets, y olvidarse de los libros en papel y centrarse en el material digital.
Claro que esto genera algún problema, como por ejemplo ¿tablets en propiedad o cedidas por el centro?, ¿necesaria una buen conexión a Internet?. Creo que la solución es seguir la misma planificación que se está haciendo con los ultrabooks (los ultraportátiles), es decir, el centro cede al alumno una tablet en todo su periodo de educación Primaria (por ejemplo desde 3º de Educación Primaria hasta que comiencen la Educación Secundaria), con un período de garantía durante x años, y después de esos años la familia pagaría el arreglo.
Creo como dice nuestra compañera Isabel Mulas que aunque estamos viviendo en un período no tan bueno económicamente hablando, es el momento de arriesgarse y pasar a las tablets. Yo creo que irá bien.
Y sobre el proyecto Edutablets te tengo que decir que conozco a los que desarrollan esta actividad y hacen interesantes cosas con los alumnos.
Buenos días, Cristina
Acabo de releer de nuevo tu post, y me encanta el tema que has elegido. Como profesores que somos la mayoria, el tema de las nuevas tecnologias en el aula, como instrumento de apoyo a la metodologia de enseñanza que impartamos, es muy importante.
Nuestros alumnos han nacido y están creciendo como muy bien has dicho, entre la evolución de cualquier tecnología, y su utilización fomenta su motivación, su trabajo y las ganas de aprender. Puede ser un cambio para intentar bajar las altas cantidades de suspensos y repetidores que tenemos hoy en día en nuestro país.
También, habrá que tener en cuenta, si las tablets, utilizaran software libre o privativo, dado que si utilizan el segundo, los padres tendrán que pagar las actualizaciones.
Aunque dado que es el ámbito de la enseñanza, los profesores ya fomentaremos el uso del software creativo y su mantenimiento en las aulas. A ver si algun dia, tenemos a un «cerebrito tecnológico » en nuestra aula.
Cristina, un saludo…
Interesante tu post, estoy de acuerdo contigo que debemos repotenciar la educación con los nuevos instrumentos tecnológicos que van surgiendo, pero siempre debemos tener presente como lo han dicho varios de nuestros compañeros, los contenidos y las estrategias para las buenas prácticas con estos medios.
Desde este ámbito podemos decir que una de las sombras de la tecnología es que debido a su constante evolución, los equipos se vuelven ineficientes, debemos tener siempre presente sus actualizaciones y repotenciaciones. Un dispositivo que se podría tomar en cuenta en las escuelas son los e-reader, el cual posee una característica muy propia que lo diferencia de otros medios tecnológicos, poseen pantallas que utilizan “tinta electrónica”. Las tablets y otros dispositivos electrónicos utilizan pantallas que emiten luz, afectando así la salud visual de los estudiantes que realizan lecturas frecuentes y prolongadas. La tinta electrónica por su parte, no emiten luz, sino que la refleja, logrando lo que se conoce como “efecto papel”. Por tal razón, las pantallas de los e-reader son mate, poseen un alto contraste y los textos pueden ser leídos como si estuvieran impresos en un libro, con cualquier inclinación, bajo la luz directa solar o luz artificial.
Con respecto a los contenidos, hoy en día prolifera el uso de libros electrónico (e-books), bien sea que se bajen libremente de las redes o se compren. Son muchas las editoriales que están ofreciendo sus textos en este formato. Igualmente tenemos a disposición una gran cantidad de Bibliotecas Digitales que permiten consultar y bajar documentos y textos digitalizados.
La mesa está servida…. Pienso igual que tú, la educación debe evolucionar…
Hola Judit, gracias por tu comentario. La utilización de tinta electrónica tiene grandes ventajas como cuentas en tu comentario. Me parece que se podía avanzar hacia la utilización de este tipo de dispositivos en el aula, pero al mismo tiempo no son tan versátiles como las tabletas, supongo que ese es el motivo por el que muchos proyectos se han decidido por la tablet.