
¿Pueden ser peligrosas las nuevas tecnologías para la educación?
septiembre 4, 2014Como, bien, afirma nuestro profesor Adolfo Plasencia en sus apuntes de la asignatura: “Hoy, con la tecnología de la telefonía móvil como infraestructura de conducción de contenidos y relaciones e interactuaciones mediante dispositivos de conexión ‘móvil’ ya podemos llamar de dispositivos de conexión ‘ubicua’, podemos decir que aunque el principio los instrumentos móviles como los tablets o los smartphones (teléfonos inteligentes) se ha creado para consumir contenidos (ése es el término usados por los fabricantes) y enfocados al ocio personal y al ciberjuego, también se pueden usar para aprender, obviamente”;
Efectivamente, estoy de acuerdo en que se puede usar como un instrumento muy eficaz para aprender, pero debíamos preguntarnos, también, qué riesgos entraña dicho instrumento con el fin de optimizar su utilidad.
El uso de los dispositivos móviles se ha convertido en una práctica social muy demandada, como podemos ver el ejemplo del mural “Los amantes del móvil, de Banksy”. En las representaciones actuales de grandes artistas observamos cómo esta práctica social está muy extendida, emulando a otros grandes artistas de otras épocas ejemplo Goya, que podemos ver hoy día su representación de la sociedad en su cuadro “La gallinita ciega”.
Pero esta práctica social, que por supuesto podría aprovecharse y sacar el mayor partido en el entorno educativo, según mi punto de vista si no es bien utilizada puede ser incluso perjudicial .Voy a exponer a continuación dos casos concretos que he vivido hace poco y me reafirman en comprobar que dichas tecnologías pueden resultar perjudiciales:
• Reunión de amigos, familiares, etc…: a la vuelta de vacaciones, que mejor vuelta a la rutina que reunirte con los tuyos, para contar las experiencias de tus viajes. En este caso, hay ventajas y desventajas de la aparición de las nuevas tecnologías móviles. La ventaja; es que con esta tecnología, puedes enseñar a través de este tipo de soporte multimedia lo sucedido en tus vacaciones (fotos, vídeos…) pero una desventaja es lo que se puede apreciar en la foto 1 que llega un momento que esta tecnología te absorbe y lo único de lo que estas pendiente es del juego que tienes delante, mirar tus ‘sitios’ en las redes sociales, etc… en vez de seguir manteniendo una relación social con las personas que tienes delante.
Foto 1. Grupo de personas únicamente atentas del móvil. Madrid. Foto: Marta Montes.
• Ocio infantil: a mi alrededor tengo niños de entre 5-12 años. Muchas de las veces que les observo, en vez de estar jugando a la pelota, en los columpios, etc… se encuentran jugando con aparatos electrónicos, tales como, vídeoconsolas, móviles, tablets… por lo que en un futuro las zonas de ocio infantil pasarán de estar como en estas imágenes:
Parque infantil, con niños jugando. Foto: 5 Mimitos
Parque infantil vacío. Madrid. Foto Marta Montes
Para concluir, creo que estos avances pueden ser una estupenda herramienta en la sociedad, en la enseñanza en general y en la escuela en particular, pero al igual que en el entorno social, en el entorno educativo será necesario cuidar e instruir a los alumnos/as de forma rigurosa sobre el uso práctico de las mismas para que no acaben siendo perjudiciales para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Hola Marta. La reflexión de tu post me perece muy oportuna. La integración del uso de la tecnología y los dispositivos móviles conectados es un tema pro resolver. El sistema educativo tiene que gestionar esto desde la enseñanza primaria hasta la universitaria. Obviamente esos dispositivos traen mucha ventajas desde las que tienen que ver con la seguridad, hasta sus nuevas posibilidades para al aprendizaje. Sin embargo hay que tener en cuenta, por una parte, que no son tecnologías sustitutivas: no vienen a sustituir a los métodos tradicionales de aprendizaje y a los modos tradicionales de educación sino que se superponen a ellos y provocan la necesitaría recombinación. En ciertos aspectos con instrumentos disruptivos al sistema tradicional educativo que esta basado en los espacios físicos y los tramos de tiempo organizados, una base que la conexión ubicua y lo que ella es capaz de traer al sistema cognitivo y a las mentes de los alumnos, se salta la organización tradicional del acto docente y su organización. Yo creo que no es cuestión solo de que cada profesor o profesora haga una solución personal para su actividad en la enseñanza. El sistema educativo al completo debería articular sistema de buena prácticas mas que un conjunto de prohibiciones o sistemas de ‘control’, ademas de enseñar al alumnado de todo tipo, las que son buenas prácticas y las que son malas en el uso de la tecnología y de los dispositivos digitales en su proceso de aprendizaje.
Por supuesto, todo ello realizado con una visión critica del tema, analizando tanto ventajas, como inconvenientes y como hacer las cosas en la práctica. Y cuanto antes mejor.
En mi opinión, los riesgos que tienen las nuevas tecnologías, se deben precisamente a una falta de educación sobre ellas, no creo que sean más o menos «peligrosas» que otras, simplemente que su irrupción en los últimos años ha llevado a que no exista una educación establecida y que en muchos casos los docentes tengan un alto desconocimiento de ellas.
Creo que las nuevas tecnologías tienen muchas más ventajas que inconvenientes, y éstos, existiendo, deben ser minimizados a través de una buena formación y aprendizaje de su uso.
No creo que las nuevas tecnologías vengan necesariamente a sustituir a las anteriores, aunque en algún caso así pueda ser, sino que hacen es sumar, con ellas, los docentes y alumnos tienen más posibilidades de enseñar y aprender, de desarrollar un aprendizaje constructivista, que a fin de cuentas es a donde se dirige (o debería) la educación en el S.XXI
Una de las principales ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías a los docentes es que permite estar en contacto con los alumnos tanto dentro del aula como fuera, por ejemplo, si el docente cuelga unas actividades en la red el alumno las va a poder realizar tanto desde el aula como desde su casa. Si utilizamos internet en nuestras clases para transmitir conocimientos el alumno también va a tener la posibilidad de acceder a ese material esté donde esté. Los sistemas informaticos para el aprendizaje ubicuo permiten tanto a profesores como alumnos publicar informacion y acceder a ella desde cualquier lugar y en cualquier momento, permiten que la interactividad entre todos los miembros de la comunidad educativa no acabe al finalizar las clases presenciales, e incluso aplicando la teoria de la clase invertida o “flipped classroom” trasladar el trabajo de parte del aprendizaje fuera del aula para asi utilizar el tiempo de clase presencial para potenciar otros procesos de aprendizaje colaborativo y constructivista dentro del aula.
La segunda ventaja, no por evidente menos importante, es la capacidad de buscar informacion de manera instantanea para corroborar y ampliar los conocimientos impartidos en clase. Un profesor no puede saber absolutamente todo sobre el tema que este impartiendo, asi que cualquier duda que surja durante la clase se puede resolver en ese mismo instante sin tener que esperar a que el profesor investigara de cara al dia siguiente como ocurria antes.
Utilizando las diferentes herramientas que proporciona internet (webquest, blogs, foros etc.) cada alumno puede compartir sus trabajos, iniciar debates, ofrecer opiniones, consultar dutas… asi el resto de alumnos podran ver su trabajo, comentarlo, opinar… y podran hacerlo tanto desde los ordenadores instalados en las aulas como desde los suyos propios en casa o incluso desde sus telefonos moviles.
Internet es un elemento muy importante para la formación ya que permite, tanto a los formadores como a los alumnos, acceder a un universo lleno de conocimientos y utilizado de una manera inteligente multiplica las posibilidades de la ensenanza tradicional.
Sin embargo es fundamental que se forme a los alumnos sobre cómo usar internet. Ante la red los menores de edad están totalmente desprotegidos, pueden acceder a cualquier contenido con sólo un “clic”. Sería necesario que todo menor de edad recibiera una formación sobre cómo usar la red, sobre cómo diferenciar que sitios son seguros y cuáles no, etc. porque mas alla de lo que nosotros podamos controlar en las aulas, los alumnos llegan a sus casas donde generalmente los ordenadores que utilizan no tienen ningun tipo de limitacion ni control.
Durante ese proceso de formacion de los alumnos menores de edad, creo que es importante que cada centro educativo seleccione los sitios web a los que puedan acceder los alumnos desde su red.
Mientras el docente controle los contenidos de los sitios web a los que pueden acceder sus alumnos, yo creo que internet no representa ningún peligro para los menores de edad, sino todo lo contrario, una ventana abierta al refuerzo de los conocimientos adquiridos en clase. Aunque no podemos olvidar que todo lo que encontremos en la red no es necesariamente mejor que lo que podamos encontrar a través de otros medios.
El principal factor a controlar usando internet en el aula es el acceso a contenidos que no estén relacionados con la asignatura. Por una parte podemos configurar los navegadores para que sólo puedan acceder a los sitios web que queramos. También existen unos programas que se instalan en el ordenador del docente y le permiten controlar lo que está viendo cada alumno en su pantalla, de este modo se puede controlar en cualquier momento que está haciendo o viendo.
Los peligros en internet existen, por supuesto, pero al igual que los hay en muchos otros ambitos de la vida, en la mano de los profesionales esta controlarlos y minimizar sus efectos.
En relación Marta a tu comentario y fotos sobre lo absorbente de estas nuevas tecnologías para ninos y adultos creo que igualmente es una cuestión de educación, que los mas pequeños jueguen con aparatos electrónicos en vez de en los parques debe ser algo permitido por sus padres, que han de elegir como quieren que sus hijos disfruten y sean educados (no voy a entrar a dar lecciones, cada uno tendrá su propia opinión de lo que es mejor para sus hijos).
Y con respecto a nosotros, los adultos, y ciertos comportamientos obsesivos con aplicaciones sociales como Whatsapp o Facebook, creo que es un poco lo mismo, aunque nosotros ya no tenemos unos padres que nos digan lo que debemos o no debemos hacer. Debemos ser nosotros mismos, por una cuestión de respeto hacia la gente con la que estamos y por propia salud mental los que aprendamos a separar momentos, a saber que las redes sociales seguirán ahí aunque pasemos una hora sin revisarlas, y que casi todo puede esperar a que nos tomemos un cafe con un amigo y nos contemos cara a cara las cosas importantes de la vida.