De la pantalla de Casio hasta la pantalla de Ordenador
junio 5, 2013
Pantalla Reloj Casio F-91W. Foto: Juan José Sánchez Campos
La convergencia mediática es definida por Henry Jenkins ( p.14) como “el flujo de contenido a través de múltiples plataformas mediáticas, la cooperación entre múltiples industrias mediáticas y el comportamiento migratorio de las audiencias” . La convergencia mediática se trata, sobre todo, de un proceso de transformación cultural que afecta a los usos de los medios de comunicación. Este proceso cultural está basado en las nuevas posibilidades de acción y participación de los usuarios que ha abierto la digitalización de los medios. En este sentido “las pantallas táctiles van a ser otra revolución en un futuro muy próximo. Van a permitir a l@s usuari@s manipular contenidos digitales con movimientos de las manos. Esta tecnología es resultado de la «combinación entre el software y el hardware” (Convergencia de medios La integración tecnológica en la era digital p. 32) ya que la accesibilidad a los contenidos y la interacción con ellos va a enriquecer los aspectos educativos de los medios como elementos de aprendizaje permanente.
La convergencia es un elemento importante del movimiento tecnológico que estamos viviendo en la actualidad desde hace unas cuantas décadas. Con la convergencia se integra en un mismo aparato funcionalidades que sólo se podía hacer con varios medios tecnológicos.
Pantallas de varios dispositivos móviles: portátiles, tablet y telefono inteligente (smarphone). Foto: Juan José Sánchez Campos
Uno de los dispositivos más importantes que tienen las tecnologías digitales son las pantallas, ya que desde ellas podemos tener acceso a la información que nos muestran los ordenadores.
La palabra “pantalla” se define, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, como la superficie en la que aparecen imágenes en ciertos aparatos electrónicos.
Día a día, nos encontramos en nuestra vida diaria, con diferentes pantallas (reloj, teléfono, ordenador, televisión, cine y muchos otros elementos tecnológicos) que cada vez cobra más protagonismo. Estamos entrando en la “era de las pantallas” dónde hay un predominio frente a los ratones (mouse) y teclados.
Ray Kurzweil, científico especializado en ciencias de la computación, dijo que “todas las tecnologías tienen un ciclo vital”. Y estamos en un ciclo en donde todas las pantallas son prácticamente táctiles. Según Wikipedia, “una pantalla táctil es una pantalla que mediante un toque directo sobre su superficie permite la entrada de datos y órdenes al dispositivo, y a su vez muestra los resultados introducidos previamente; actuando como periférico de entrada y salida de datos, así como emulador de datos interinos erróneos al no tocarse efectivamente. Este contacto también se puede realizar por medio de un lápiz óptico u otras herramientas similares. Actualmente hay pantallas táctiles que pueden instalarse sobre una pantalla normal, de cualquier tipo (LCD, monitores y televisores CRT, pantalla de plasma, etc.)”.
Para terminar quiero hablar sobre la interfaz, un elemento importante en todo movimiento tecnológico.
La interfaz se define como cualquier tipo de ‘espacio’ de interacción, sobre todo personas y ordenadores o máquinas digitales para el uso de personas o que ponga en comunicación a personas con el propósito de obtener o adquirir información y conocimiento. Es necesario para que exista una interacción persona-ordenador.
¿qué nos deparará el futuro con las pantallas y la interfaz?
Sistemas informáticos para el aprendizaje ubicuo. 
¿Y el interfaz que va más allá de las pantallas? (Juro que no hablaré de películas o televisión…) xbox kinect permite muchísimos hackeos. Un ejemplo es la web de la comunidad Kinect Hacks (http://www.kinecthacks.com/). Muchos de ellos sirven para controlar modelos en 3D, pero también pueden controlar una TV (http://www.kinecthacks.com/kinect-powered-google-tv-controller/) o para controla Ableton (un programa para disparar loops y sintetizadores digitales, http://www.kinecthacks.com/synapse-for-kinect/).
No solo a través de pantallas podemos controlar contenidos, ¡con gestos en el aire!
Me ha gustado tu entrada, un saludo!
Buenas tardes Javier.
Muchas gracias por tu comentario y por que te gustase la entrada.
Pues ahora soy yo el que voy a hablar de películas y de televisión, concretamente de serie de televisión. Conforme estaba leyendo tu respuesta, me ha venido a la mente «The Big Bang Theory» en la secuencia de que hablan de que tienen que tomar «aire fresco» y los dos se ponen a jugar con la Wii o Xbox kinect (creo que era la Wii). Aunque sea tratado un poco con un tinte de comedia, no da la sensación de irrealidad, sino de que en la actualidad lo está haciendo cada vez más gente, haciendo que cada persona sea cada vez más parte del juego, con una poderosa interacción persona-interfaz, interfaz-persona.
Un saludo y ánimo en los últimos días de trabajos
Pues sí, la integración de los dispositivos tecnológicos en el día a día es evidente y se conciben ya como algo «natural» o, mejor dicho, cotidiano. Precisamente hace un par de días mi sobrina de 5 años estaba jugando con una cámara de fotos estropeada, de hace unos 15 años, y me preguntó que por dónde se veían las fotos cuando las hacías. le dije que antes no era así y que solo se podían hacer unas pocas y luego había que llevarlas a la tienda para que las pusieran en papel. Me contestó que vaya rollo, que así no se podían repetir si te salen mal.
Este cambio me parece representativo: es una nueva forma de entender algo que ya existía, como «tomar el aire» jugando a la Wii.
Realmente Henry Jenkins no se equivocó en lo que nos depararía el futuro puesto que anticipó que las pantallas táctiles iban a ser una revolución en un futuro; a decir verdad ya lo son hoy en día puesto que ¿quien no tiene un smartphone? ¿quién sabe vivir sin el desconectado de la red?A decir verdad a mi a veces si que me gustaría vivir desconectada aunque por otra parte reconozco los grandes beneficios que nos reporta la red.
Preveo que en un futuro no muy lejano prescindiremos de teclados y ratones y todo pasará a integrarse en las pantallas táctiles; al menos esa es la tendencia que aprecio.
Juanjo gracias por tu post. Muy instructivo.
Saludos
Isabel M.
Buenas tardes Isa.
Muchas gracias por tu comentario y por que te gustase la entrada.
Totalmente de acuerdo con tu opinión de que iremos a un mundo de pantallas táctiles. De hecho, no sé si es mi sensación, pero cada vez veo menos anuncios en internet y televisión de ordenadores portátiles y más de tablets, Ipad y demás. Creo que esto es un aviso a lo que seguro que pasará.
Leyendo tu comentario me acuerdo de los dos másters que hemos pasado, tanto tu como yo. Pienso y me pregunto a veces ¿que sería de nosotros sin las tecnologías? En mi caso, con la ayuda de las tecnologías he aprendido muchas cosas que hace 4 o 5 años no me imaginaría aprender.
Un saludo y ánimo en los últimos días de trabajos
Gracias por la respuesta Juanjo. La tecnología acerca personas, crea vínculos entre personas que tienen o comparten intereses comunes, fomenta el aprendizaje colaborativo,… y mil cosas más positivas aunque a mi modo de ver es muy necesario formar a nuestros alumnos para que tengan conocimiento de todo aquello que pueden encontrarse en la red antes de tirarse a su «piscina»
La formación abre la mente y posibilita el conocimiento de muchos aspectos por eso a mi modo de ver es fundamental que esta se posibilite y potencie entre todo el profesorado.
Muchas gracias por tu contestación y lo mismo digo: !Suerte en el trabajo final¿
Lo primero que muchas gracias Juanjo por tu post. La verdad es que me ha recordado a una obra de Giovanni Sartori, todo un clásico: «Homo Videns: La Sociedad Teledirigida» (2002). En donde acuñaba un nuevo concepto el «Homo Videns» frente al «Homo Sapiens». En donde la imagen lo da todo hecho, en este caso, la televisión. Como si las pantallas nos absorbieran y nos capturasen… al estilo «Poltergeist: fenómenos extraños» (1982), que fue producida y coescrita por Steven Spielberg. Y es que en palabras de Sartori, el «Homos Sapiens» es producto de la cultura escrita, mientras que el «Homo Videns» es producto de la imagen. Es decir, haciendo alusión a los efectos cognitivos que produce la imagen en nuestras mentes, o las pantallas; en donde el hombre sólo está expuesto a un sólo tipo de influencia.
Sin embargo, más allá de este clásico propio del siglo pasado, me atrevo a decir que del «Homo Videns» está caminando hacia nuevas interfaces, es decir, organismos cibernéticos, como sucede con los «cyborg», en palabras de Isaac Asimov. Pero volviendo a la «genealogía» de las pantallas. Lev Manovich, en su obra «El lenguaje de los nuevos medios de comunicación» (2005), define «pantalla» como «la existencia de otro espacio virtual, de otro mundo tridimensional, que está encerrado en un marco y situado dentro de nuestro espacio normal»; y explica cómo ha evolucionado la pantalla concebida como «clásica» frente a la mencionada «realidad virtual» en donde la pantalla desaparece por completo. En donde dicha «realidad virtual» utiliza un monitor montado sobre una cabeza, donde las imágenes ocupan por completo el campo visual del espectador. En donde el espacio virtual que antes quedaban en espacios reducidos a pantallas de televisión o cines, a abarcar por completo el espacio real.
Es resumen, un paso desde la interfaz de la ventana y la realidad virtual hacia las pantallas dinámicas o, mejor dicho, una interfaz interactiva entre el hombre y el ordenador ante la aparición de la realidad virtual. Una evolución que ha pasado desde una imagen fija y estática (la fotografía, el cine, etc.), hacia una «presencia» interactiva, lejos de las «pantallas». Ivan Sutherland (conocido por muchos como el creador de los gráficos de la computadora) en 1968 , escribió lo que supondría este «salto»: «la idea fundamental que hay tras la representación tridimensional es darle al usuario una imagen en perspectiva que cuando él se mueva»; como las gafas de Google o «Google Glass».
En definitiva, si partimos de este «salto evolutivo» queda contestada la pregunta del fin de las pantallas por la superación de campos visuales o realidades virtuales. Ya lo decía Alfonso Gutiérrez Martín somos «algo más que ratones y teclas» en su obra la «Alfabetización digital» (2003).
Aunque en la actualidad hay quien se cuestionan esta evolución… y estos cambios tecnológicos, debido al gran «salto» que hemos dado, no sé si hacia atrás o hacia adelante… Y es que hay estudios científicos que demuestran que estamos perdiendo facultades y capacidades, y se cuestionan ¿está el ser humano involucionando debido a las nuevas tecnologías? Por lo que me pregunto si esta evolución de la interfaz está haciendo al hombre más frágil o, por el contrario, más sólido…
Buenas tardes.
Muchas gracias por tu comentario Cristina y porque te haya gustado la entrada.
Sobre lo que comentas de lo de Homo Videns y Homo Sapiens, creo y llevándolo al ejemplo de mi post, el Homo Videns al ver y manipular la interfaz puede convertirse en Homo Sapiens, persona que ha adquirido una serie de competencias.
Sobre lo que me dices de con la ayuda de las interfaces yo creo que con la ayuda de las interfaces y las pantallas estamos desarrollando multitud de capacidades y de competencias.
Un saludo y ánimo en los últimos días de trabajos
Muy buena aportación, Cristina. Sobre las pantallas del fururo he encontrado este pedazo de entrada: http://www.omicrono.com/2013/05/las-innovaciones-que-permitiran-conseguir-las-pantallas-del-futuro/
Hola Juan José,
Me gustó mucho tu post, es interesante como podemos ver la evolución de las pantallas, las cuales de acuerdo a su funcionalidad, hace ya varios años cuando surgieron los primeros ordenadores, eran consideradas sólo un dispositivo de entrada y salida de datos, ellas solas no funcionaban, para poder decir que se tenía un ordenador, la pantalla debía estar conectada al CPU y a un teclado.
Hoy en día se puede decir que tienen vida propia, tienen todo integrado. Justo hoy mi hijo me mostraba una pantalla que podía funcionar como un ordenador conectada a un teclado o como una Tablet al desconectarla.
Todo al gusto y necesidad del consumidor…
Buenas días (casi tardes) Judit.
Muchas gracias por tu comentario y porque te haya gustado la entrada.
Si hace 18-20 años más o menos que fue cuando descubrí los ordenadores por primera vez, me dirían que iba a ver un cambio tan grande y que iban a aparecer otro tipo de pantallas como las del smartphone o tablet, no me lo creería. En los primeros años era o la «pantalla» de la televisión, o la «pantalla» del ordenador, y ahora que si ordenador de mesa, ordenador portatil, smartphone, tablet, y conforme pase el tiempo seguro que aparecerán otras tecnologías con pantallas (como las Google Glass por ejemplo)
Y esto las empresas ven un potente factor de consumo, porque ya en televisión por ejemplo anuncian muy poco ordenadores portátiles sino smartphone de la marca esta, o tablet de la marca otra. Es interesante reflexionar eso.
Un saludo y ánimo en los últimos días de trabajos del máster
Muchas gracias Juan José por tu Post.
Pues si que evolucionaron rápido las pantallas, tal como dices en tu post.
Estoy de acuerdo con que la interfaz es un elemento clave, ya que actualmente permite la mayor parte de la interacción con los medios tecnológicos. Para lo que antes se necesitaba ratón y teclado, además de pantalla para poder ver los resultados, hoy únicamente es necesario disponer de una pantalla táctil, lo cual aunque tampoco se puede decir que facilite mucho las cosas, hace posible que en un dispositivo mucho más pequeño y manejable, tipo tablet, se puedan realizar prácticamente las mismas cosas que en un ordenador mucho más grande que necesite un montón de periféricos.
Buenas tardes Cristina.
Muchas gracias por tu comentario y porque te haya gustado la entrada.
Analizando los nuevos modelos de aprendizaje creo que para las tablets es el momento idóneo de incorporación a la educación con la aparición del m-learning. Creo, que con el m-learning y las tablets van a ser unos «buenos amigos» y parte muy importante en la educación del futuro.
Un saludo y ánimo en los últimos días de trabajos del máster.