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El Gran Hermano te ama

abril 21, 2012

8 ideas sobre cómo perder el control de tu vida privada en Internet

Imagen: Carlos Escaño (CC) BY-NC (versión derivada de imagen “Autorretrato” de Perdidoenlared Control+C)

1. Matrix existe (… y cobra por horas)

Lyotard explicaba que una forma de legitimación del conocimiento en nuestra época es el poder: decidir sobre lo que podemos conocer y lo que no. El control de la realidad es un elemento clave. Lógicamente quien construya la realidad tendrá siempre muchas posibilidades de tener “la razón” y un tanto por ciento muy elevado de la información es generada por los mass media. Internet es un sub-contexto que ha caído dentro del gran contexto informacional recreado por grandes corporaciones. Nos resistimos a caer, pero… ¿Quien facilita  y monitoriza nuestra conexíón? Los oscuros decididores lyotardianos (esos mass media) han construido una realidad ad hoc, un proto-matrix que cohabitamos. Si esta premisa es real nuestras vidas están paseándose por el escaparate que llamamos ciberrealidad. Nuestras vidas ya les pertenecen. Sólo debemos pagar el cobro que Matrix nos reclama por habitarla: el precio es demasiado alto…

2. ¿Quieres avance tecnológico? Renuncia a tu vida privada

Si no renuncias a parte de tu privacidad no puedes aceptar los últimos avances tecnológicos”, afirma Eric Smith, presidente de Google. Pero ¿realmente es inevitable, o es el modelo que se ha implantado? ¿No hay maneras legales de impedir que nuestra información sea recabada y gestionada por las empresas que nos ofrecen dicha tecnología? Creemos que sí, y que en cualquier caso, es obligación de esa empresa poner las medidas para ajustarse a la ley y al derecho a la intimidad de las personas. Nos venden la idea cada vez más extendida de que renunciar a la privacidad es un “mal menor”, a cambio de lo último en tecnología, y nuestra vida privada pasa a ser propiedad de otros.

3. El sutil arte de la censura

Pluralidad de cosmovisiones confluyen en la Red, donde libremente colgamos opiniones en plataformas abiertas a la gente… en teoría. En la práctica, las plataformas donde alojamos los contenidos pueden decidir y deciden, por ejemplo Youtube, censurar un discurso de Hugo Chávez o un documental que cuestiona el poder político en Italia

 

La empresa Youtube alega “contenidos inadecuados” o “derechos de autor”, pero queda constancia de que mide los vídeos con diferente rasero, aplicando la censura selectiva. En la era del cloud computing, la potestad (legal, pero en último término ética) sobre lo que es lícito o ilícito para ser mostrado no recae sobre nuestro criterio, ni sobre el criterio más justo, sino sobre los criterios (léase intereses) de entidades empresariales y/o gubernamentales.

Imagen de Mikel Garcia (CC) BY-NC (versión derivada de imagen “Censored” de Mick & Wout)

4. Redes Sociales: redes comerciales

Saber más de ti que tú mismo, el súmmum de la publicidad al alcance de cualquier empresa, gracias a las redes sociales. Pueden segmentarnos, clasificarnos. Publicidad a la carta, gracias a los datos personales que introducimos en las redes sociales. Facebook o MySpace fueron salpicadas por la polémica cuando quedó al descubierto que filtraban datos confidenciales y de rastreo de los usuarios a las empresas de publicidad. Con la reciente compra por parte de Facebook del editor de fotografías Instagram, el control sobre el almacenamiento de nuestras imágenes ha cambiado de manos sin previo aviso, y Facebook dice que todo seguirá igual, pero ¿quién se fía cuando el usuario es pura mercancía al servicio de la rentable publicidad?

Imagen de Mikel Garcia (CC) BY-NC (versión derivada de imagen “Facebook friends photo grid” de Dan Taylor)

5. Te mando un mensaje ¿privado?

¿Quieres enviarme un correo que sólo lea yo?… Mándame un correo postal. Es más seguro que el correo electrónico, cuya información es susceptible de ser archivada por el administrador del sitio. Si el administrador es tu jefe (en una cuenta de correo electrónico laboral), la ley le permite acceder a tus mensajes. Si el administrador es una cuenta personal, no te creas inmune: Yahoo!, Hotmail o Gmail pueden escanear y almacenar tus mails (también los eliminados) y conocen sobre qué hablas y con quién. Si el mayor perjuicio es el spam, no es tan grave. Pero por si acaso, cuidado con lo que envías, porque ese gigantesco almacén de datos puede ser una presa codiciada para fines no muy transparentes.

6. Edición invisible o quis custodiet ipsos custodes?

¿Qué pensarías si tu vecino o cualquiera que ande por la calle fuera quien organizara tu agenda sin tu consentimiento? No te preocupes, esto no sucede. Bueno, puede suceder si tu vecino o viandante está trabajando en Facebook o Google y accede al rastro que dejas impreso en la red. Estas empresas practican la edición invisible (Eli Pariser, 2011). Edición generada sin nuestro consentimiento: Google organiza tus búsquedas sin tú saberlo: qué navegador usas o desde dónde y cuándo buscas. Facebook prioriza las actividades de tus amistades por tus afinidades o ideología…, sin tú saberlo: a  través de algoritmos discriminadores hay robots que organizan tu agenda: qué buscar y con quién relacionarse. Robots vigilantes del flujo de información, pero… ¿Quién vigila a los vigilantes?

7. Idea para película de ciencia ficción

Imagínate a ti mismo en un futuro inmediato. Un futuro donde centro del espionaje a escala mundial esté operativo controlando cada bit de información de la red. Un centro vigilado con extrema seguridad y en el que queda grabado cada paso que das en Internet: quedarán registrados emails, búsquedas, llamadas por móviles, datos de tarjetas de crédito… Todo. Imagínate que más de un gobierno quiere poner en marcha un plan de control a sus ciudadanos (por ejemplo, se nos ocurren… E.U.A. y Reino Unido) e imagínate que quieren hacer que el Gran Hermano de 1984 de George Orwell se convierta en una pesadilla real.

Bien, deja de imaginarlo:

• WIRED:  The NSA Is Building the Country’s Biggest Spy Center (Watch What You Say)

• PERIODISTA DIGITAL: Gran Bretaña vigilará Internet y monitorizará llamadas y mensajes

8. Yo he visto cosas que vosotros no creeríais…

El futuro de la web 4.0 pasa por implementar un completo sistema operativo en la web, según Nova Spinvack . Esta web estará operativa en menos de dos décadas: tecnología con una potencia y velocidad iguales al nivel de procesamiento neuronal humano. Inteligencia artificial desarrollada en la nube. Se establecerán lazos distintos con la máquina. Ese sistema operativo tendrá capacidad para actuar en nuestro trabajo o en nuestra educación de manera “autónoma” ¿Dónde entrará nuestra voluntad de control ante esta circunstancia? ¿Dónde estará entonces la frontera entre privacidad-esfera pública?

En 2019, según la obra magna de R. Scott, viviremos un futuro en el que los Blade Runners correrán tras androides replicantes con inteligencia artificial, pero… ¿Y si finalmente somos nosotros quienes corramos delante de los replicantes?

18 comentarios

  1. Vale, me habéis agobiado. Ahora entiendo el dicho de que la ignorancia te hace ser más feliz.

    De todas maneras habría que analizar si el grado de intimidad que se desee proteger es el mismo para todas las personas.

    http://filosofia.laguia2000.com/filosofia-y-sociedad/la-intimidad


    • Efectivamente, María, uno debe optar entre diferentes grados de privacidad e intimidad. Pero la ciudadanía debe ser consciente de que esos niveles de privacidad/intimidad están ya muy condicionados, y que en cierto modo es (obviamente) imposible «aislarse» o ser «invisible» en la red. Esto me lleva a un par de preguntas: ¿Necesitamos reinventar internet y establecer otras maneras de relación? ¿Es posible?


  2. Esto es consecuencia de la sociabilización de la red ya que vamos dejando nuestros datos personales, gustos y preferencias por todo Internet. Y como Internet no es gratis, aunque tome la apariencia de que sí, hay muchas empresas interesadas en sacar partido a las informaciones que generamos utilizando las maravillosas herramientas web 2.0 que nos regalan para disfrutar en nuestros tiempos de ocio.


    • ¿Sociabilización o privatización? Desde la conexión hasta el buscador de turno, pasando por las redes sociales, aplicaciones o software especializado están mediados en gran parte por empresas privadas con ánimo (animísimo) de lucro… Otro motivo para intentar usar siempre que se pueda software libre.


    • Así es, José Luis, a veces actuamos a la ligera dejando nuestros datos a la mínima, pero la gente que anda con cuidado tampoco se escapa: simplemente usar una cuenta de correo electrónico ya te expone al administrador de dicha cuenta, que puede acceder a tus datos y a los contenidos que manejes. No debería ser tan difícil poner límites al administrador en cuanto al acceso y a ciertas gestiones que hace de las cuentas de los usuarios, por ejemplo.


    • Asusta el poder de control que ejercen sobre nosotros, el uso de correo electrónico, de redes sociales, de un simple buscador, … acumulan una enorme cantidad de información que ponen a la venta sin nuestro consentimiento ni conocimiento.
      Particularmente me inquieta el desconocimiento, la ingenuidad y la confianza de los usuarios- cibernautas que acceden a la red y desprotegen sus datos personales, exponiéndolos al alcance de muchas empresas interesadas.
      Como bien comenta Mikel, aunque pretendas vigilar tus acciones y evitar el acceso a tu intimidad a veces es inevitable, ¿qué podemos hacer? ¿No usar Internet?


  3. Aquí os dejo algunos ejemplos del abuso de la privacidad, para entrar en tema. A principios de septiembre, un diseñador de páginas web cogió un anuncio online aparentemente real de una mujer que buscaba una aventura sexual y lo envió a la sección “encuentros casuales” del Craigslist de Seattle. Hubo 178 respuestas al falso llamamiento sexual, muchas de las cuales incluían fotos comprometidas. El diseñador luego publicó todas las respuestas en un sitio web público -incluyendo fotos, direcciones de correo electrónico y otros datos personales-, que cualquiera podía ver.La
    Federal Trade Commission anunciaba que Xanga, un sitio de redes sociales muy popular entre la gente joven, pagaba una penalización civil de 1 millón de dólares a cambio retirar los cargos por violar la ley Children’s Online Privacy Protection Act, que según expertos legales es la única ley federal que regula temas de privacidad en Internet. Según la Federal Trade Commission, Xanga recopilaba, utilizaba y revelaba información personal de niños de menos de 13 años sin notificar previamente a sus padres y tener su consentimiento. El gobierno declaraba que hasta el momento la multa era la mayor que se había aplicado por violar dicha ley que protege la privacidad infantil.
    Asimismo está el caso de una joven de Seúl que viajaba en metro con su perro cuando el pobre animal hizo sus necesidades en el suelo. La joven no limpió la suciedad, lo cual causó el enfado de otros usuarios y, según parece ser, a medida que aumentaba la tensión la mujer se volvió cada vez más maleducada. Empleando un móvil con cámara –Corea del Sur tiene el mayor porcentaje de móviles con cámara del mundo, del orden del 99%-, un pasajero sacó una foto de la mujer y del estropicio que su perro había causado. La foto, junto con una explicación describiendo lo que había ocurrido, se colgó en la Red y al final acabó apareciendo en multitud de sitios web. Algunos usuarios incluso pudieron identificar a la joven, la cual se convirtió prácticamente en un paria, abandonó la universidad y se escondió.
    Las cuestiones fundamentales derivadas del mal uso de Internet son ampliamente conocidas desde hace tiempo.

    La pregunta no es ¿ de quién es la información?, sino ¿Es posible proporcionar protección a los individuos para prevenir que su información personal llegue a manos del resto del mundo? Y si es posible, ¿Cómo?”. Es triste que nuestro sistema legal sea más eficiente protegiendo los derechos de propiedad intelectual que el de la dignidad de una persona.


    • Estoy de acuerdo, Encarni: muy triste que el sistema legal esté mucho más preocupado no por la propiedad intelectual, sino por los intereses económicos que actualmente generan. Se puede proteger la propiedad intelectual pero también el acceso a la cultura (fundamental) y la protección de la privacidad e intimidad…, pero…, una vez más llegamos a la triste conclusión económica: no es rentable. Lo es mucho más desproteger la privacidad y acotar la cultura de manera privativa.


    • Encarni, lo que mencionas me recuerda cómo un ciudadano recurrió el año pasado a los juzgados para que quitaran la información que aparecia en Google cuando se escribía su nombre y apellidos (una multa en el boletín oficial del Estado), ya que le perjudicaba a la hora de buscar trabajo y demás. El juzgado le dio la razón. Creo que la gente es cada vez más consciente de la importancia de la privacidad y la intimidad, y de cómo ésta se ve vulnerada tantas y tantas veces en Internet (muchas veces, por nuestra propia ingenuidad), por lo que incluso han nacido empresas que ya ven negocio en ello y que proponen borrar todos tus datos de Internet (o, si no lo consiguen, lograr que aparezcan «muy atrás» en los buscadores).
      En cualquier caso, la ingenuidad de los usuarios no debería ser una razón para que se vulneren sus derechos, y debería ser una ley más estricta la que tomara cartas en el asunto.


  4. Muy interesante vuestro post aunque la última frase da miedo…¿Y si finalmente somos nosotros quienes corramos delante de los replicantes? esperemos que no….
    La verdad es que el tema de «vender nuestra alma» está en la actualidad muy presente y no somos conscientes de hasta que punto se utiliza la información que proporcionamos. Me ha recordado a un libro que leí hace un tiempo llamado «Numerati» ,no se si lo conocereis pero habla de la pesadilla orwelliana que conlleva el control absoluto de nuestra intimidad a raíz de datos y hechos que no nos damos cuenta pero que estamos proporcionando a las empresas y gobiernos.


  5. Gracias, Mª José. Aunque todavía es una idea para un guión (¿Blade Runner 2 ?), estamos un poquitín más cerca de la «persecución digital». Algunos parecen empeñados en hacer realidad la fundación de una policía de una Policía del Pensamiento orwelliana, y lo estamos viendo en nuestro país con la penalización de la resistencia pacífica o de la convocatorias de algunas concentraciones vía Internet . Suena exagerado, lo sé. Suena a ciencia ficción y a conspiranoia, también lo sé. Pero la vigilancia digital es un hecho, ahora sólo falta que la máquina empiece a correr… 😦


    • Así es, suena exagerado pero el control es cada vez más exacerbado y ya hace tiempo que lo vivimos, con los chips en los pasaportes, la proliferación de cámaras de vigilancia en la calle (o las grabaciones para Google Earth), la posibilidad de localización a través del móvil… El mensaje es doble: como apuntamos en el post, por una parte se nos dice que es un «daño colateral» de la adquisición de nueva tecnología, algo inevitable; por otra, que es por nuestra seguridad. Pero cuando el daño colateral es el ataque a derechos fundamentales, no deberíamos tomárnoslo a la ligera.


    • Acabo de leer este artículo…, un poco más de cibervigilancia, Mª José: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=147967&titular=%BFel-mundo-avanza-hacia-una-(ciber)polic%EDa-global?-


      • No dejan de sorprenderme, ahora la policia cibernética….nos dicen que es para vigilar la delicuencia pero de paso nos investigan a todos. Lo que también me parece fuerte es que realicen una encuesta para ver que piensa la gente acerca de la seguridad y los resultados los digan 3 años después, cuando en ese momento a lo mejor la gente piensa cosas diferentes.


  6. Aunque ya no me sorprende nada, me ha parecido increíble el artículo que me has enviado, Adolfo (http://elpais.com/elpais/2012/04/23/opinion/1335191144_330648.html), en el que se da cuenta de un nuevo servicio de creación automática de noticias, al gusto del consumidor. Evgeny Morozov reflexiona al respecto y advierte de los peligros que puede tener crear parcelas cerradas/personalizadas en las que sólo consumamos los contenidos que nos interesan y agradan, creando un círculo vicioso y cerrado de información, o controlado por el administrador de dichos contenidos, y respecto al tema que nos ocupa en este post, subraya que «la auténtica amenaza proviene de nuestra negativa a investigar las consecuencias sociales y políticas de vivir en un mundo en el que ser un lector anónimo se está volviendo prácticamente imposible. Es un mundo que los anunciantes, además de Google, Facebook y Amazon, están ansiosos por habitar»: Es decir, que hay muchas empresas ansiosas por que no seamos personas anónimas, sino consumidores personalizados y clasificados, cuyos gustos conocen a la perfección, para vendernos los productos a la carta.

    Morozov es un autor muy interesante, crítico con la tecnología. Escribió «El Engaño de la Red: El lado oscuro de la libertad de internet», en el que criticaba el ciber-utopismo y alertaba de que Internet no es tan libre como aparenta, o que tiene potencial para no serlo, si cae, por ejemplo, en manos de gobiernos autoritarios. Al fin y al cabo, en este post hemos visto ampliamente lo fácil que es rastrear e identificar a las personas. Morozov pone como ejemplos a China, que bloquea y censura material en Internet, y a Irán, cuyo gobierno, tras la revuelta internauta de las últimas elecciones, aprovechó la tecnología para vigilar y controlar a los disidentes a través de las redes sociales. Os dejo una reseña muy completa sobre el libro: http://www.lapatilla.com/site/2011/01/12/analisis-el-lado-oscuro-de-la-libertad-de-internet/


    • Definitivamente intentan que el usuario anónimo desaparezca y así poder tenernos a todos «fichados» pero lo de la tener notícias según la persona que lo lee ya me parece demasiado, si eso ocurre ya no podremos informarnos más, nos etiquetaran de una manera y ya siempre tendremos comentarios según esa forma de pensar, no podremos cambiar de opinión ni conocer otros puntos de vista


      • Hasta el periódico se presenta igual a todos los lectores, pero esta noticia cambia la concepción de este medio. Se podrá adaptar al usuario, creando noticias a su gusto, conociendo a la vez sus preferencias, sus intereses, sus hobbies, … Se pasará de ser un lector anónimo a como bien dice Mª José a un ciudadano «fichado». Actualmente sube al alza los datos personales, la intimidad de las personas, para su venta a empresas de publicidad. ¿No tienen nada más moral que ofrecer?


  7. Suma y sigue: una noticia de hoy en el País: «Ciberespiados por su bien» http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/04/27/vidayartes/1335555403_669308.html
    Bajo la consigna de preocupación y protección de la «libertad», destruimos el principio de privacidad, y por ende, demolemos paradójicamente los pilares de la libertad. Es una estrategia muy antigua: yo te cuido, yo te vigilo, yo te controlo, yo te doy libertad, yo protego esa libertad. Ese «yo» es siempre una superestructura que puede exceder el concepto de colectividad cuando se le supone características estatales y, por otro lado, cuando adquiere tientes privados se recubre de un carácter crematístico (y de poder) perverso.
    Con todo, es fácil llegar a preguntarse: «¿Es necesario la vigilancia y espionaje para salvaguardar la libertad?» Posiblemente gocemos de las «libertades» actuales gracias al control invisible que se ha ejecutado desde años (décadas), no?. ¿Es posible la libertad sin un control tal de la tecnología? (lanzo los interrogantes para seguir reflexioando)



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